8/12/2006

Apio Verde to me....

Todo partió el Sábado 1 de Agosto. Fue la fiestoca de mi amiga Teresa, toda farandulera ella. A pesar de que yo no tenía nada que ver, asumí que la fiesta era mía y partí celebrando mi cumpleaños en fiesta ajena. Top. Excelente estuvo. Como ando de recién soltera, ando de lo más liberada. Onda que me puse un vestido rojo sangre, cosa de no pasar desapercibida. Y bailé, muchísimo. Me hicieron sanguchito entre dos minos increíbles. Se agradeció bastante, me dejaron lista para un mes completo. La fiesta tenía un toque surrealista: Rafael Cavada bailaba sin polera ante la indiferencia general, y Bastián Bodenhoffer jugaba a ser Miguel Bosé, mientras yo no podía dejar de pensar que yo lo veía llorar por Nice mientras comía marraqueta con margarina y leche con Milo. Farándula. Terminé en el Casa Cena, comiendo machas a la parmesana y camarones al pil-pil a las 6:30 am, invitada por un amigo. Al día siguiente me declaré agonizante, hasta las 8:30pm, hora en que salí a comer con mi papá a un restaurant riiiico. El Lunes me invitaron a comer mis hermanitas. Yo estaba raja, así que ni me dio para arreglarme. Error: fuimos al Amorío, y entre pura gente linda yo andaba con mi mejor pinta de profesora de básica a mal traer. Aparte de un desfile farandulero (incluyendo a mi eterno y casi senil amor platónico, Panchito Reyes), estaba el protagonista de Crimen Ferpecto, excelente película española. Como estaba de cumpleaños, me armé de valor, me guardé el pudor y la plancha en un oscuro lugar y le fui a pedir un beso de feliz cumpleaños. Jejeje, harto viejita para ponerme groupie, pero bueno. Y al día siguiente... ¡¡Cumpleaños!! Fueron mis grandes amigos a verme. Me pasé dos horas pelando y desvenando un kilo de camarones ecuatorianos, pero valió la pena. Me tomé dos mango sours, que dado que soy abstemia me dejaron bastante a mal traer, equilibrándome apenas en mis zapatos de leopardo. En eso llegaron todas mis amigotas del colegio: la Tere, la Leti, la Marce, la Andrea y la Paloma. Mucho misterio, mucho preguntarme si los demás amigos que estaban en mi casa eran de confianza. Porque claro, me querían entregar mi regalito, y les entró algo de pudor a algunas. El regalo no era otra cosa que... ¡un vibrador nuevecito de paquete! Y de color púrpura, lo más cercano a Moradín que encontraron. A pesar de que Moradín es irreemplazable por ser el primero, mi nuevo juguete es increíble, ya que cumple con todas sus funciones esperadas. De hecho, ya es el hombre de esta casa. Duerme a mi lado, y le paso el control remoto a veces. Y me río cada vez que lo veo, y me acuerdo de todos mis amigos que estaban en mi cumpleaños, lo bien que lo pasé. Ojalá fuera como en Alicia en el País de las Maravillas, para celebrar los no-cumpleaños, y hacer estas cosas más seguido.

7 comentarios:

witch dijo...

No puedes ser tan igrata. Me parece imperativo que pongas la foto de Purpurín en este post. ¿Como es la cosa? Le pasas el control remoto y no lo presentas en sociedad?

Simone dijo...

He rebautizado a Purpurín: su nombre ahora es Deep Purple. Metalero y apropiado. Jajajajaja.

Unknown dijo...

que buen regalo!!!!!!!!!

felicidades...fiel a tu blog

G. dijo...

esoooooo!!! ....buen regalooo!!! feliz cumple linda!!

es lo mejor celebrar el cumple y pasarlo bien!!

besos

G.

G. dijo...

jajaja deep purple que ad-hoc!!!

Mladinski Centar GLASNOST dijo...

Nice picture :)

Rulo dijo...

...y los camarones duraron menos que calzón de novia en noche de bodas...