12/25/2007

Ay

Al final pareciera que escribo para puro quejarme. Es Navidad y estoy medio bajoneada, lo que es natural dado que estoy a miles de kilómetros de mi gente. Y se viene el año nuevo... Releyendo el post de hace un año atrás, no lo he hecho tan mal después de todo. Me vine a Francia. Soy menos cobarde que hace un año atrás. He vuelto a la adolescencia. Pero no logro sentirme livianita. Arrastro cosas incluso a través de los miles de kilómetros. Amores truncos que todavía me duelen. Frustraciones y expectativas que no se cumplen ni se van a cumplir. Y la negra sensación de sentirse fuera. Una de mis grandes amigas se casó, y no estuve ahí. Otra va a tener guagua, y tampoco estaré ahi. Mi amor de infancia ya me olvidó por completo. Y es mamón decirlo, pero la suma de todas esas cosas me tiene bajada. Es como si al irme de Chile, simplemente hubiera desaparecido de la vida de muchos. Obviamente mi familia sigue al pie del cañón, y sé que es injusto quejarme así. Pero no sé. En algún punto siento que mis últimos días en Santiago fueron un error, y después me da rabia pensar eso. Pero los hechos me dan la razón. Quizás era verdad, es mejor no sentir demasiado, no arriesgarse, así simplemente uno se anestesia. Qué pena que sea así, que sea preferible dejar las grandes cosas para otros y quedarse sólo con lo mediocre. Pero no se puede andar por la vida creyendo que si se siente bien entonces es bueno. Es mejor cuando no se siente, ni bueno ni malo. Puede que ese sea un buen propósito de fin de año: alcanzar (¡por fin!) la indiferencia.

6 comentarios:

Unknown dijo...

"no se puede andar por la vida creyendo que si se siente bien entonces es bueno"

uff...no sabes cuanto me llega esa frase en estos momentos de mi vida.

Por lo mismo, sigue tu también al pie del cañón. Luego , más vieja, recordarás este tiempo como aquel en el que te hiciste a ti misma...

suerte

Unknown dijo...

uuuuf mija parece q le llego un poco de depresion. son las navidades nefastas q te llegaron lejos y no estas aca haciendo las cosas q siempre te gustaron caleta. alcanzar la indiferencia es fome y se siente como el pico igual
vamos q se puede no mas
aca hay varios q si nos acordamos de ti y te extrañamos y te deseamos lo mejor
ademas si te da la hueva y te vienes donde me voy a quedar si voy a francia
jaja
besos
love
serranidae

Anónimo dijo...

hola, soy periodista de LUN y me interesa contactarme contigo por el sitio web de simioficial.blogspot.com.
Mándame tu número a natalie_16cl@hotmail.com.Saludos.

Tuccini dijo...

No se preocupe todo esto es por los malditos recuentos de fin de año que vienen con estas malditas festividades. Usted ya tomo una desiciòn y debe mantenerla; Me recuerda a Salvatore di vita de cinema paradiso, sio no la vio, véala y sabra de lo que hablo.
Saludos
El Grinch

Héctor dijo...

Tus síntomas, a mi juicio, son auspiciosos. Si te preocupa no estar para y con las personas que aprecias es, en básico rigor, producto del anhelo de dar y realizarte en la felicidad del otro.
Es un común denominador de las personas con intelecto y espíritu elevados (en sentido objetivo, o sea, ajeno a la inteligencia), orientar sus pasos a la entrega desinteresada del producto de sus progresos más que a los dividendos individuales de los mismos.
Actualmente las personas que "triunfan" son aquellas que reciben mucho de sus semejantes; normalmente muchísimo más de lo que corresponde al servicio que prestan. Sin embargo, sentimientos como los que experimentas son la antesala para concluir individualmente que el valor de una persona debe medirse en función de lo que entrega y no en función de lo que recibe.

Suerte.-

El Peruano Dorado dijo...

wrmTe invitamos a conocer el fracaso literario menos resonante de todos los tiempos: Ferrante Kramer, el Peruano Dorado. Estamos en http://ferrantekramer.blogspot.com/. Esperamos hacerte reír un buen rato.

Patricio y AlexB